Los trofeos se han nombrado en honor al creador del primer largometraje de animación de la historia. En 1917, Quirino Cristiani dirigió 'El Apóstol', una producción argentina en donde se utilizaron 58.000 dibujos en 35 mm además de varias maquetas que representaban edificios públicos y las calles de la ciudad de Buenos Aires. De su trabajo se hizo eco incluso Disney, que viajó a Argentina en 1941 con el motivo del estreno de 'Fantasía'. Es por esto que los Premios Quirino rinden homenaje al talento y la creatividad iberoamericana.
Los principales objetivos de estos premios son: poner en valor el talento y la industria de la animación iberoamericana; generar lazos y redes entre ambos lados del océano; construir un mercado iberoamericano de la animación donde circulen las obras audiovisuales; premiar la animación en todos sus formatos, largometrajes, cortos, piezas de escuela, series, series on line, etc; y generar un foro de coproducción iberoamericano en paralelo a los premios.
El evento reunirá por tanto la floreciente industria latinoamericana junto con la de Portugal, Andorra y España creando un puente entre ambos continentes y construyendo un verdadero hermanamiento para desarrollar juntos el gran mercado que es Iberoamérica.