Periódicamente la conocida tienda Ping Pong Shop nos sorprende con eventos de gran calidad en sus pequeñas y acogedoras instalaciones. Especializados en música independiente y en diseño, en todos sus campos, forman un gran reclamo para quienes estamos deseosos de disfrutar de la compañía de grandes del sector.

Una de esas jornadas la vivimos hace pocos meses con la compañía de Folch Estudio, que logró eclipsar todas las expectativas con una conferencia cargada de conocimiento conceptual y muy acorde al agradecido público asistente.

Su precursor, Albert Folch, quiso acudir en esta ocasión para ejercer de anfitrión a uno de los ilustradores independientes más influyentes de la escena actual: Alex Trochut. Alumno de la prestigiosa escuela Elisava y nieto de uno de los pilares tipográficos españoles del siglo XX, Joan Trochut, ha trabajado con cuentas envidiables: Adidas, Nike, Diesel, Channel 4, British Airways, Sixpack, Wired Magazine, …..

Posee un nivel de análisis y equilibrio visual altísimo, quizás genéticamente heredado de su abuelo, que amplió al trabajar en la digitalización de una de las tipografías familiares, la Super Veloz.  En las distancias cortas Alex Trochut no hace sino agrandar su leyenda de tipo humilde, metódico y trabajador.

Como decíamos al principio de este artículo, Ping Pong Shop nos dio el placer de su compañía el pasado viernes en un evento que se desarrolló bajo estricta invitación debido a cuestiones de aforo. Apenas una treintena de diseñadores y agradecidos clientes de la tienda pudimos disfrutar de una conferencia en la que Trochut desplegó un amplio abanico de trabajos que abrieron más de una boca y causaron envidia sana por la altísima calidad de los mismos.

Trochut parece ser ajeno a la dicotomía inspiración y trabajo, pues todos sus bocetos se encaminan hacia un desarrollo espectacular desde sus primeros esbozos. Sólo su grado de autoexigencia le permite escalar entre la dificultad y la genialidad para alcanzar cotas asombrosas.

De cada trabajo muchos nos hubiéramos quedado con el primer boceto como trabajo final, pero Trochut sigue desgranando hasta la última posibilidad cada uno de los proyectos que afronta y eso se nota en los resultados finales. Especialmente marcados por desarrollos tipográficos con equilibrios al detalle, sus trabajos son fiel reflejo del espíritu que les impone.

Así puestos no pudimos sino rendirnos a su talento y su cercanía, y disfrutar del personal análisis que realiza en sus conferencias. Una de las cosas que pueden definir su afán de estudio es un mapa de su histórico de trabajos que mantiene para identificar en qué trabajos iniciales se ha inspirado y qué combinaciones de ellos ha usado. De ese modo se permite “accidentes”que abran nuevas vías en sus estilo mediante la mezcla de dos o más desarrollados con anterioridad.

Una vez más, la gente de Ping Pong Shop atrajo grandes y numerosos agradecimientos de quienes estuvimos en el evento. Agradecimientos que no puedo sino hacer extensivos en esta publicación por la apuesta por el diseño que desde su inauguración decidieron seguir. Gracias Ping Pong Shop y…… a ver con qué nos sorprendéis la próxima vez.

Fotografías de Juan Carlos Gracia. Cortesía de Ping Pong Shop